Con la llegada del último mes del año, también se acercan diversas festividades cónsonas con la temporada. Un ejemplo lo fue el jueves de “Acción de gracias”, celebración donde muchas personas se reúnen para festejar en familia y amistades, o como lo es hoy, que se celebra el día de dar (Giving tuesday). Sin embargo, este no es el caso de todas las personas que celebran alguna ocasión pertinente a esta época. Hay quienes van anticipando la llegada de esta temporada con mucha angustia.

Es muy común pensar y asociar las fiestas con celebración, comidas, reuniones, música, familia y demás. Hay quienes identifican estos meses como los mejores del año,  donde pueden experimentar unión familiar, disfrutar de unas breves vacaciones, de paz, comer alguna receta de alguien especial e incluso reencontrarse con amistades o familiares. Ciertamente, es un gozo poder darle cierre a un año más lleno de ilusiones y alegrías, no obstante, no todos tienen la fortuna de celebrar las fiestas de estos meses de la misma forma. Es esta una de las razones por las que te invito a tener una perspectiva distinta sobre estas fiestas.

Como bien mencioné previamente, para muchxs estos meses pueden ser sinónimo de angustia. Pues, diversas circunstancias como lo pueden ser: estar sin empleo, no contar con apoyo familiar o la familia se encuentra fuera de su país, pueden causar síntomas de tristeza, aislamiento, desesperanza, soledad, ansiedad, pensamientos suicidas, entre otros. En adición, y en nuestra cultura Puertorriqueña, la llegada de las fiestas navideñas son sinónimo de aumento en consumo de alcohol, lo que puede ser un problema para personas con dificultades asociadas a esta sustancia, lo que puede causar una recaída.

Es importante estar conscientes e identificar signos que nos permitan asistir o ayudar a otros, así como buscar ayuda para nosotros. Ese es el primer paso para así identificar cómo podemos sobrellevar emociones, situaciones difíciles o incómodas durante esta época del año. Quizás, en vez de enfocar nuestra atención sólo en los regalos, la ropa o en las fiestas en sí, podemos hacer que este año y los próximos por venir, hagamos la diferencia. ¿Qué podemos hacer diferente? En adición a pasar un buen tiempo en familia, con comidas, buena música y fiestas, podemos ayudar a otros que lo necesitan, así como cuidar de nuestra salud mental. Que sea sinónimo de dar sin esperar nada a cambio, de sentir paz interior y de cuidar de nuestro bienestar. Una acción sencilla puede hacer que esta época, sea completamente diferente para una persona, incluyéndonos.

Primero, podemos identificar quién pueda estar pasando por un momento difícil, ya sea un vecinx, un familiar cercano, un amigx, un conocidx, un compañerx de trabajo o de estudios, o entidad de la comunidad. Puede ser alguien que perdió un familiar, una mascota o el trabajo, que se siente solo, que no tiene hogar o dinero para comida o artículos de necesidad. Tal vez, eres tú quien se siente identificado o identificada con lo antes mencionado.

Aquí te comparto algunas recomendaciones para que puedas manejar de forma distinta estos meses del año:

  1. Identifica personas de confianza y/o lugares a quien puedas acudir para buscar ayuda. Un ejemplo de esto puede ser un amigo o amiga, un vecino o vecina o algún miembro de la comunidad.
  2. Habla con un profesional de la salud o recomiéndalo. Esto puede ser con tu médico de cabecera, un psicólogo o psiquiatra.
  3. Lee un libro de tu interés. Si es una actividad que disfrutas o quizás disfrutabas. Visita alguna biblioteca o librería.
  4. Practica ejercicios de meditación. Hay libros, aplicaciones para los celulares, videos en las redes sociales donde puedas encontrarlos. Aquí te comparto el enlace de un artículo escrito por la Dra. Gracia sobre la conciencia plena o “Mindfulness”.
  5. Identifica una actividad de auto-cuidado que puedas realizar, aunque sea una vez a la semana. Ejemplos de auto-cuidado pueden ser: visitar un parque, la playa, escuchar música que te haga sentir bien, comer algo que te sienta bien o escribir.
  6. Identifica ropa, zapatos o artículos que estén en buenas condiciones y puedas donar. No sólo ayudas a alguien más, si no que también ayudas a nuestro planeta tierra.
  7. Ejercítate. No necesariamente tienes que realizar los ejercicios en un gimnasio. Hay varias ideas y actividades que se pueden realizar para fomentar el ejercicio físico desde la casa o tu comunidad. Tal vez, puedes caminar alrededor de tu casa o quizás hay alguna pista cerca que puedas visitar varias veces a la semana. No sólo te ayudará a despejar tu mente, si no que liberarás endorfinas que te ayudarán a sentirte bien.
  8. Disfruta de alguna comida (con moderación) que te haga sentir bien. Esto puede ser con una fruta, un chocolate o cualquier comida de tu predilección.
  9. Promueve la práctica espiritual, si para ti es importante. Medita, ora, etc.
  10. Ten contacto con la naturaleza. Siembra un árbol, camina descalzx, visita la playa, un río, ten unos minutos para apreciar el amanecer o el atardecer.
  11. Establece límites en estas fiestas. Sé honestx contigo mismx.  Por ejemplo, no te obligues a asistir a actividades que afectan tu salud mental. Si estás recibiendo algún tratamiento para manejar el consumo de alcohol, déjale saber a otrxs, para que te apoyen en el proceso y no sientas la tentación sólo por complacerlos. 

            Estas fiestas, practiquemos la compasión hacia otrxs y hacia nosotros. Seamos capaces de escuchar a los que nos rodean y a ayudarlos, si es posible. Un gesto de compasión no conlleva demasiada energía, siempre y cuando tengamos la intención de realizarlo. Con dar un poco de tiempo, dejarles saber a otros que estamos para escucharlos, para ofrecer un abrazo, compartir una comida o simplemente para apoyarlos en un momento difícil, puede hacer una gran diferencia.

Escrito por: Dra. Arelis Montijo-Pérez, Psicóloga Clínica

            *Actualmente la Dra Montijo ofrece servicios psicológicos en San Juan, PR. La encuentras en la Oficina del Dr. Miguel Vázquez en Hato Rey y en Espacio 26 LLC. en Santurce.

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